El consejero de Salud y Familias de la Junta de Andalucía, Jesús Aguirre, «ha dado instrucciones para empezar a inocular la cuarta dosis de la vacuna» contra la Covid-19 a población inmunodeprimida.

En concreto, «Andalucía empezará a inocular ya la cuarta dosis a ese sector de la población que hace entre cinco y seis meses se puso la tercera dosis«, según ha anunciado este martes el consejero de la Presidencia, Administración Pública e Interior y portavoz del Gobierno andaluz, Elías Bendodo, en la rueda de prensa posterior a la reunión semanal del Consejo de Gobierno.

Posteriormente, la Consejería de Salud y Familias ha detallado en un comunicado que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha comenzado ya a vacunar con cuarta dosis de ARN mensajero a las personas mayores de 12 años pertenecientes al grupo 7, conformado por personas con alguna de las condiciones o patologías de muy alto riesgo de Covid-19, mayormente inmunodeprimidos, como personas trasplantadas de órgano sólido, trasplante de progenitores hematopoyéticos (alo y autotrasplante), en caso de tratamientos inmunodepresores, receptores de terapias Car-T, personas con inmunodeficiencias primarias, en tratamiento con quimio o radioterapia y personas con síndrome de Down con 40 años o más, entre otras condiciones que valorará su profesional sanitario de referencia.

En total, serán 109.564 personas las que reciban esta cuarta dosis, según ha detallado la Consejería, que ha precisado que estas personas serán citadas directamente por sus hospitales de referencia, o, en el caso de personas con síndrome de Down, a través de los centros de salud.

En general, se sabe que estas personas tienen una protección inferior a la de la población general frente al covid, con más posibilidades de padecer complicaciones y formas más graves de la enfermedad, por lo que es recomendable optimizar sus defensas contra el virus con esta cuarta dosis de vacuna, según argumenta la Junta.

La cuarta dosis de recuerdo está indicada en caso de que hayan pasado cinco meses desde la tercera dosis de ARN mensajero (Pfizer o Moderna).

El pasado mes de enero, la Comisión de Salud Pública, en la que están representadas las comunidades autónomas y el Ministerio de Sanidad, acordó que las personas inmunodeprimidas reciban una cuarta dosis de la vacuna contra la Covid-19 a los cinco meses de la última dosis.

«Las personas que recibieron dosis adicional de vacuna ARNm por estar incluidas en el Grupo 7 o ser personas que reciben tratamiento con fármacos inmunosupresores recibirán una dosis de recuerdo a los cinco meses de la última dosis», explicó el Ministerio de Sanidad.

«LIDERAZGO» ANDALUZ EN VACUNACIÓN

De este modo, la Junta de Andalucía va a inocular la cuarta dosis de la vacuna a ese sector de la población, según ha señalado el consejero portavoz, quien ha presumido de que esta comunidad autónoma «lideró al principio, durante y sigue liderando la campaña de vacunación en España», de forma que, desde su inicio, a finales de diciembre de 2020, ha administrado más de 17,8 millones de dosis a la población.

De igual modo, Bendodo ha valorado que la «sexta ola» de la pandemia ha iniciado «definitivamente un camino descendente» y «estamos alumbrando el fin definitivo de la misma», que llegará «cuando los ingresos hospitalarios estén al mínimo», según ha señalado antes de apostillar, no obstante, que «seguimos peleando con la pandemia» porque aún no ha terminado.

SOBRE LA OBLIGATORIEDAD DE LAS MASCARILLAS

En esa línea, y a preguntas de los periodistas sobre la posibilidad de retirar la obligatoriedad en el uso de las mascarillas en espacios interiores, el consejero portavoz ha comentado que «todos los españoles estamos deseando quitarnos la mascarilla tanto en exterior como en interior», pero hay que actuar ante la pandemia con «responsabilidad», además de con «anticipación», que es como se ha venido conduciendo el Gobierno andaluz, según ha defendido.

Bendodo ha remarcado al respecto que «está demostradísimo que la mascarilla evita contagios», como, según ha abundado, lo prueba el hecho de que en «el primer invierno de pandemia», el del año pasado, «la gripe prácticamente no existió en España», porque con el uso de «la mascarilla y el gel de manos se consiguió prácticamente erradicar ese año».

El consejero portavoz ha concedido que, «si la evolución de la sexta ola de la pandemia sigue en ese proceso decreciente, tendrá sentido que se vayan relajando las medidas», pero ha advertido de que, en todo caso, una posible retirada de la obligatoriedad de las mascarillas se adoptaría en Andalucía en el marco de su comité de expertos.

En ese sentido, Bendodo ha defendido que ha sido «clave» en la gestión de la pandemia en Andalucía el que «cualquier decisión vinculada a la pandemia lo ha sugerido y propuesto un comité de expertos», y en este caso también se actuaría así, según ha concluido.

Fuente: Europa Press.