El Hospital de Valme aplica con éxito la técnica del ganglio centinela en tumores

El servicio de Ginecología del Hospital Universitario de Valme de Sevilla ha potenciado la cirugía laparoscópica en procesos oncológicos, y ello ha permitido la implantación de técnicas nuevas quirúrgicas menos invasivas para el abordaje de los tumores de esta especialidad clínica.

Una de ellas es la técnica del ganglio centinela, ratificada en el cáncer de mama, y trasladada en este centro al cáncer de cérvix y endometrio, explica el centro hospitalario en un comunicado.

Conforme la jefe de servicio de Ginecología de este centro, Rosa Ostos, la apuesta por la cirugía laparoscópica en procesos oncológicos «no solo ha incrementado la satisfacción de las pacientes al potenciar la alta resolución y disminuir su estancia hospitalaria, sino que ha tenido un enorme peso estratégico a lo largo de la pandemia al permitirnos proseguir sosteniendo exactamente la misma actividad quirúrgica».

Esta proyección pivota en el trabajo ordenado de ginecólogos, anestesistas y enfermeros de quirófano junto a la disponibilidad de moderna tecnología adquirida para el bloque quirúrgico. Específicamente, Ginecología tiene a su alcance una avanzada torre de laparoscopia dotada con cámara de fluoresceína que ha facilitado la aplicación de la técnica del ganglio centinela.

La nueva práctica que se ha incorporado en el hospital hispalense se basa en el empleo del ‘verde de indocianina’, cuya innovación está valorándose para cirugía oncológica y general. Consiste en inyectar una substancia (verde de indocianina) con capacidad de migración por los canales linfáticos e identificar el ganglio centinela. Facilita una imagen en alta resolución con una tecnología para advertir el colorante aplicado anteriormente y de esta manera llevar a cabo una cirugía más precisa y menos invasiva, sustituyendo la cirugía abierta por la laparoscópica.

Esta iniciativa enmarcada en la lucha continua de este centro contra el cáncer ginecológico va a suponer que todos los años se favorezcan cerca de 20 mujeres con cáncer de cérvix, endometrio o bien vulva. Se optimará la eficacia de la terapia quirúrgica con la adecuación de los tratamientos a la extensión del tumor y se minimizará la agresividad quirúrgica en casos de estadios iniciales, «con una restauración más rápida y ganando en calidad de vida de las perjudicadas».

AVANCE PARA ESTADIFICACIÓN QUIRÚRGICA

El pronóstico de muchos cánceres ginecológicos (cáncer de mama, de cuello uterino y de endometrio) depende de la invasión linfática, ya que se diseminan predominantemente por esta vía. Al respecto, la responsable de la Unidad de Ginecología Oncológica, Isabel Gasca, ha señalado de qué manera a lo largo de los últimos años «se ha avanzado en las técnicas de proyección de imagen, pero esta progresión no ha sustituido a la estadificación quirúrgica».

Por consiguiente, los profesionales transforman la aplicación de esta técnica en una importante herramienta para decidir tratamientos quirúrgicos conforme la afectación del tumor, de menos a más agresivos. El equipo de ginecólogos que está materializando este avance está dirigido por Isabel Gasca; conforman la Unidad de Ginecología Oncológica José María Romo, Ainhoa Holgado e Ignacio Salazar.

Desde el punto de vista clínico destacan como beneficios de este proceso menos invasivo el hecho de reducir el tiempo quirúrgico, minimizar las complicaciones asociadas, como la acumulación de líquido en la pelvis y miembros inferiores e acrecentar la calidad de vida de las pacientes.

De igual forma, subrayan las ventajas de la cirugía laparoscópica frente a la cirugía abierta, en caso de ser necesaria la linfadenectomía. «Mejora la identificación de estructuras anatómicas, deja la coagulación de pequeños vasos de forma preventiva y reduce la morbilidad postoperatoria».

GANGLIO CENTINELA

El ganglio centinela es la primera estación linfática donde drena el tejido tumoral y, por ende, es representativo del estado ganglionar total. Tras su detección, se extrae y se examina para determinar si hay células cancerosas presentes.

Un resultado negativo de la biopsia sugiere que el cáncer no se ha diseminado; al contrario, si resulta positivo (presencia de células cancerígenas) permite sospechar la extensión de la enfermedad. Y, en un caso así último, favorece la conveniente estadificación quirúrgica; esto es, establecer la mejor opción de cirugía evitando la realización de linfadenectomías pélvicas (cirugía beligerante) innecesarias de forma sistemática.

Por último, Gasca ha señalado en el caso del cáncer de endometrio el valor añadido del estudio del ganglio centinela. «Aparte de reducir las complicaciones derivadas de la linfadenectomía, deja advertir a aquellas pacientes con riesgo bajo e intermedio que se van a poder beneficiar de un tratamiento adyuvante –siguiente a la cirugía–.

Fuente: Europa Press.