16 de julio: rezando por la anhelada normalidad a la Virgen del Carmen

Salvador Rivas Fernández. Con la llegada del verano, muchos viajes nos llevan a conocer rincones de nuestra tierra que aún no conocíamos y que nos enamoran. Y hay algo peculiar en muchos de esos lugares y es la admiración de sus vecinos a la Virgen del Carmen.

Santoral que celebramos el 16 de julio y que, en condiciones normales, nos llevaría a ver las distintas procesiones organizadas por las Hermandades.

En este 2021 de nuevo nos toca visitarlas en la Iglesia, haber presenciado sus cultos y rezarle por la llegada de tiempos mejores.

Añoranza de normalidad

Se acaba el curso cofrade antes de las más que merecidas vacaciones, pero aún nos quedan esas ganas infinitas de imaginarnos cómo será todo a la vuelta de las mismas. ¿Veremos, poco a poco y si la situación sanitaria lo permite, alguna Imagen por las calles? ¿Será en parihuela o en paso? A los cofrades solo el hecho de pensarlo ya nos pone el vello de punta.

Recordando esa trasera de un paso de palio, el cambio de costero, la revirá eterna o el largo y reposao de algunas de nuestras Hermandades.

Ya sentimos cerca la vuelta a esa normalidad que añoramos en cada despertar. Quizá no tan pronto como querríamos, o sí, no lo sé, depende en gran medida de nuestra actitud ante la situación actual. Sigamos luchando con responsabilidad por lo que más queremos y así podremos tener muy pronto aquellos momentos que anhelamos en el interior de cada uno de nosotros.

Vacaciones cofrades

Y solo me queda decirte que disfrutes de un tiempo de reflexión y desconexión para una vuelta llena de vitalidad. Eso sí, no olvides tu música cofrade tumbado en la playa, tu conversación en cualquier chiringuito o si veraneas en el interior. Si no, no seríamos nosotros mismos.

Septiembre vendrá cargado de emociones y grandes noticias, no lo dudo. Vendrá cargado de cultos, de actos, de vueltas a los ensayos de nuestras queridas bandas, de los equipos de costura y bordado, de los coros, de nuestras Juntas de Gobierno…, siempre trabajando para servir a sus Hermanos y engrandecer más nuestra gran pasión.

Con todo esto, te deseo lo mejor y que el esfuerzo increíble de estos meses atrás se vea recompensado.

Acudamos a la Virgen del Carmen, muy particularmente en esta celebración de la Virgen y pidámosle por los más necesitados, por los enfermos, por la desaparición de esta pandemia y por una recuperación de todos los trabajos que dependen de este sector de la Semana Santa.

Por todos ellos, por ti mismo, y por todos los que somos cofrades.

¡Viva la Virgen del Carmen!